La masturbación es una alternativa para practicar la sexualidad
Según la Biblia, la masturbación es una alternativa válida para practicar la sexualidad. La Biblia hace puntos específicos sobre la masturbación y explica cómo afecta tanto las relaciones con otros como con Dios. Es una alternativa al coito que se realiza sin la ayuda de otra persona. De hecho, muchas mujeres cristianas se sienten culpables por masturbarse. Es una práctica que puede ayudar a los hombres a evitar el coito con mujeres.
La masturbación es una actividad sexual segura que no propaga el COVID-19 y es una alternativa al coito. Para prevenir la propagación del virus, es importante lavarse las manos y cualquier equipo sexual antes de participar en la masturbación. Luego, es recomendable evitar tocar a otras personas durante la masturbación. Otra regla social es la distancia.
es un pecado contra nuestros cuerpos
Si vamos a adorar a Dios y servirle fielmente, entonces debemos santificar nuestro cuerpo. La Biblia habla del cuerpo humano como un instrumento de justicia, un instrumento que puede destruir obras satánicas u ofrecer un sacrificio sacramental. La Biblia también nos enseña que el cuerpo humano tiene una relación con el culto, lo cual lo eleva por encima de toda otra creación.
La Biblia nos enseña que nuestro cuerpo es "espiritual," por eso Jesús tiene un cuerpo físico. Su cuerpo glorificado también se describe en Filipenses 3:21. Tener un cuerpo físico es necesario para digerir pescado. Aquellos que comen pescado sin tener un cuerpo no pueden digerirlo. Por lo tanto, los espíritus deben tener un cuerpo físico para digerirlo.
es una actividad cuestionable
Hay una buena cantidad de confusión sobre si la masturbación es pecaminosa o no. Si bien la Biblia no dice explícitamente que la masturbación sea un pecado, casi siempre es el resultado de pensamientos lujuriosos, estimulación sexual inapropiada o pornografía. Por lo tanto, un error común que muchas personas cometen es creer que la masturbación siempre es incorrecta. En realidad, muchas personas están mucho mejor evitando por completo la masturbación que luchando con la culpa.
Aunque la Biblia no aborda específicamente la masturbación, sí la menciona en la biblia. Por ejemplo, Proverbios 25:28 compara la masturbación con la ciudad de los muertos. Si bien la Biblia no menciona específicamente la masturbación como un pecado, sí se refiere a otras formas de inmoralidad sexual, como la lujuria.
es una forma de vida que evita el exceso o la carnalidad
Hay muchos aspectos de la vida que debes evitar para vivir una vida equilibrada. La masturbación es una de esas áreas. Es un pecado tener una relación sexual inapropiada y es un síntoma de comer en exceso. Comer en exceso hará que tu cuerpo se descomponga y te causará sufrir de acidez estomacal. Además, la masturbación es una manifestación física de una necesidad más profunda de estar con otra persona.
Para evitar enredarse con el exceso de comida y alcohol, es importante aprender a cocinar y comer de forma saludable. Afortunadamente, hay muchas recetas geniales para una comida saludable que no dañará tu cuerpo. El primer paso para cocinar de manera saludable es aprender a disfrutar de la comida deliciosa. Si no estás acostumbrado/a a cocinar, deberías probar algunas recetas.
es una alternativa para practicar la sexualidad
Si queremos practicar la espiritualidad de una sociedad cristiana, es importante que hagamos de este tema parte de nuestro programa de formación. Al hacerlo, las dimensiones moral y espiritual siempre deben tener prioridad. Hay dos objetivos específicos para un programa de formación en sexualidad cristiana. El primer objetivo es enseñar a los individuos a amarse y respetarse a sí mismos. El segundo objetivo es enseñar a los individuos a aceptar a los demás tal como son.
Las personas transgénero, homosexuales y transexuales deben ser tratadas como iguales. Estos son los principios que deberían ser la base de cualquier educación sobre el amor. La educación sexual cristiana debería basarse en la reverencia, la cual debería guiar toda educación. El respeto por el género es esencial para la educación sexual de un cristiano. Refleja el amor de Dios. La comprensión bíblica de la sexualidad debería ser nuestra guía.
